“A casi 6 años del femicidio de mi hija, después de tanto sufrimiento, de tanto dolor, de tantas cosas a las que nos tuvimos que enfrentar, por fin llega el juicio. No fue nada fácil atravesar estos años: nos caíamos, nos levantamos, pero sabíamos que teníamos que ser fuertes para seguir pidiendo justicia por ella, algo que se lo debía, que se lo prometí”, dice Valeria Contín, mamá